miércoles, 26 de diciembre de 2007

Video: Tsunami en Thailandia

Ya que anteriormente hemos hablado de las olas de marea (también denominadas tsunamis y que usualmente son causadas por terremotos y también por deslizamientos submarinos o volcanes submarinos) aquí está un video de el tsunami en Thailandia, en el año 2005.


Era una soleada mañana de domingo, en el sureste asiático. Miles de personas disfrutaban tomando el sol. A las 06:58 de la mañana todo cambió.
Frente a la isla de Sumatra y desde el fondo del mar, un terremoto de 9.2 grados en la escala de Richter sacudió la zona. Dieciocho minutos después, el mar provocaría una de las peores catástrofes de los últimos 40 años.
El terremoto generó olas de más de diez metros de altura, que se desplazaron a una velocidad superior a los 800 kilómetros por hora.
El tsunami golpeó a Indonesia, Sri Lanka, la India, Malasia, Tailandia, Islas Maldivas y extensas aéreas costeras de Birmania, Bangladesh, Kenya y Somalia.
En dos horas, el tsunami o maremoto barrió con todo lo que encontró a su paso en la costa sur de Asia.
Bañistas, deportistas y pescadores fueron las primeras víctimas.
Con el paso del tiempo surgiría la verdadera cara de la catástrofe. En ésta, la peor tragedia en el sureste asiático murieron 280 mil personas.
Casi dos millones de personas se quedaron sin un techo donde vivir. un año de distancia, miles de personas siguen reportadas como desaparecidas.
La tragedia hubiera sido menor si la India y Sri Lanka hubiesen contado con un sistema de alerta de tsunamis. No hubo alerta.
La fuerza de la naturaleza simplemente fue imparable.
A la dimensión de la tragedia se igualó la respuesta de la comunidad internacional.
Gobiernos y organismos humanitarios de todo el mundo donaron más de siete millones de dólares para ayudar a quienes perdieron todo ante el embate de la naturaleza.
A pesar de los esfuerzos de los gobiernos para reconstruir los daños causados por el tsunami, pasarán años antes de que la vida vuelva a ser la misma en el sureste asiático.

Influencia de las Mareas


Las aguas de la superficie del océano son movidas por los vientos dominantes y se forman unas gigantescas corrientes superficiales en forma de remolinos.

El giro de la Tierra hacia el Este influye también en las corrientes marinas, porque tiende a acumular el agua contra las costas situadas al oeste de los océanos, como cuando movemos un recipiente con agua en una dirección y el agua sufre un cierto retraso en el movimiento y se levanta contra la pared de atrás del recipiente. Así se explica, según algunas teorías, que las corrientes más intensas como las del Golfo en el Atlántico y la de Kuroshio en el Pacífico se localicen en esas zonas.

Este mismo efecto del giro de la Tierra explicaría las zonas de afloramiento que hay en las costas este del Pacífico y del Atlántico en las que sale agua fría del fondo hacia la superficie. Este fenómeno es muy importante desde el punto de vista económico, porque el agua ascendente arrastra nutrientes a la superficie y en estas zonas prolifera la pesca. Las pesquerías de Perú, Gran Sol (sur de Irlanda) o las del Africa atlántica se forman de esta manera.

En los océanos hay también, corrientes profundas o termohalinas en la masa de agua situada por debajo de la termoclina. En estas el agua se desplaza por las diferencias de densidad. Las aguas más frías o con más salinidad son más densas y tienden a hundirse, mientras que las aguas algo más cálidas o menos salinas tienden a ascender. De esta forma se generan corrientes verticales unidas por desplazamientos horizontales para reemplazar el agua movida. En algunas zonas las corrientes profundas coinciden con las superficiales, mientras en otras van en contracorriente.

Las corrientes oceánicas trasladan grandes cantidades de calor de las zonas ecuatoriales a las polares. Unidas a las corrientes atmosféricas son las responsables de que las diferencias térmicas en la Tierra no sean tan fuertes como las que se darían en un planeta sin atmósfera ni hidrosfera. Por esto su influencia en el clima es tan notable (ver Fenómeno del Niño)